de su persona, no le cabe, para nada,
no soporta no saber si el resto dice
o no dice cosas en su contra, odia
y está irritable, por las noches, en el día,
en privado modela su perspectiva que nace
al trasladarse a través de una cuerda anudada
al vacío, no le gusta mostrar sus relieves,
que los identifiquen, no acepta la traslucidez
de su personalidad, a veces, quisiera arrancar
de un tirón una hoja, tirarle una firma
acelerada que brille como un relámpago
incandescente, meterlo en un sobre
de papel madera, un pase de saliva en el pegote
y al depositarlo en la ranura más cercana,
comprar, por fin, su ausencia, quisiera
y a la vez no, vive y a la vez no, sueña
a solas, sueña solo con la lengua fina
de un cúter naranja, un recorte exacto
fundará un nuevo continente, sueña
con ese continente y con una capa importante
de nieve que ante la menor pisada
de su bota cede y al próximo se vuelve a borrar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario