sábado, 19 de octubre de 2019

Nunca están dadas las condiciones

lo pensó una, lo pensó dos,
lo pensó tres 

y no pensó más nada.
dejó plasmado el rouge
en el vaso de telgopor,
apagó la colilla que quedo flotando
en el café de máquina
y volvió a meterse rápido en la oficina.
supo bien que hoy no era el día,
tampoco mañana, 

tal vez nunca están dadas 
las condiciones para cumplir
el sueño que sueña el niño 

en el interior del escondite 
que a base de silencios 
le hemos construido.

porque aunque reniegue 

y vea el presente como una transición,
yo también soy uno más.
sigo bronceando mi piel 
con luz artificial,
viajo cansado a la altura de los caños
y gente muerta le da nombre 
a las calles que camino.
imagino salidas, busco atajos, 
me convenzo de lo que pienso.
lo intento. 
pero qué insoportable
es esta sensación 

de que la fiesta está siempre 
en otro lado.
al llegar al fondo del pasillo
solo unos, solo ceros,















lunes, 14 de octubre de 2019

No es más

amanecer en la Antártida,
desnudo y sin una pierna
como si nada hubiese ocurrido
una imagen impactante pero
débil
y en menos de un minuto
el viento que me despierta
la desvanece.
la ráfaga hace rebotar en el balcón
una maceta vacía
a la que vengo postergando su tierra
y su semilla
golpea cada vez más fuerte
contra un lado y el otro del cuadrilátero
hasta quedar incrustada entre dos rejas
de metal y fin.
no hay acertijos que resolver
no soy testigo de lo sagrado
no es más que el nacimiento y muerte
de un sonido
al que este jinete persigue desde atrás
para rodearle el cuello de palabras.